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Islas Feroes, un lugar de cuento

Las Islas Feroe son un grupo de islas ubicadas a medio camino entre Islandia, Noruega y Escocia. Estas islas son una región autónoma del Reino de Dinamarca, pero no pertenecen a la Unión Europea. Tienen una superficie de 1.399 km² y poco menos de 50.000 habitantes.

El archipiélago feroés consiste en 18 islas de origen volcánico, de las cuales 17 están habitadas. Su territorio es eminentemente montañoso, con acantilados que sirven de hábitat a decenas de miles de aves marinas; está dominado por praderas y carece de bosques. El clima es frío, aunque moderado por la corriente del Golfo. Hay suficientes recursos hídricos, pero en general el suelo es pobre y los recursos naturales escasos. La economía depende fundamentalmente de la pesca y su industria derivada. No obstante, la sociedad feroesa cuenta con un estado de bienestar y un índice de desarrollo bastante elevado.

Streymoy, la más grande de las islas, es el hogar de la ciudad capital de Tórshavn. Dentro de la ciudad hay varios sitios para ver, como Tinganes – la parte antigua de la ciudad; el Fuerte de Skansin; y la Casa Nórdica – un centro cultural nacional que presenta varios eventos musicales durante todo el año.

En la misma isla, visite los acantilados de Vestmanna donde usted puede tomar un bote para visitar sus cuevas y observar una variedad de aves, como el skúa ártico, alcas y frailecillos. Realice un paseo hacia la tercera isla más grande, Vágar, para ver los dos lagos más grandes de la isla, Sørvágsvatn y Fjallavatn, los cuales ofrecen fantásticas oportunidades para pescar.

Los pueblos de las islas Feroe parecen de cuento: las casas tienen los techos cubiertos de hierba para resguardarse del clima, el viento y la humedad. Otra singularidad por la que es conocida es por la cruel tradición de matar ballenas calderones.

Son lugares únicos e inmaginables que quedarán grabados en la retina de tus ojos durante toda tu vida, todo un cuento de hadas hecho realidad en las Islas Feroes