Entre Muros y Cee se encuentra la aldea de Pindo y ahí está este famoso monte. Tiene una altura de 627 metros según la wikipedia, suficiente para una vez arriba ver un extenso y precioso paisaje; la playa, el mar, la montaña…
Lo cierto es que lo que primero impresiona es la subida para alcanzar la cima del monte Pindo. Un camiño estrecho y muy empinado que si el coche va cargado hasta los topes puedes hacerle sufrir el motor. Aún así se sube y llegas hasta practicamente la cumbre sin mayor problema que ese.
Según se va subiendo no está de mas mirar atrás y contemplar las vistas. Ya una vez arriba sales del coche y lo primero que suele hacer todo el mundo es asomarse a alguna orilla del precipicio, sobre las grandes rocas uno parece rozar el cielo, a veces sopla fuerte el viento, por lo que si es un día nublado o en otoño o invierno, es imprescindible ir bien abrigados.
Se dice que hace siglos hubo castillos e incluso son muchos los escritores que han contado historias con este monte como protagonista. Hay varias leyendas en torno a esta zona.
Lo mas característico que se puede ver además en este monte Pindo es la cascada de Ézaro, por ser la única en Europa cuyas aguas caen directamente al mar. Eso sí está regulada su apertura y solo se puede ver en verano, los fines de semana nada mas.